Antes de abordar este tema, se debe aclarar que se trata de una parafilia presente en los seres humanos, recordemos que una parafilia no significa que algo sea malo o que esté mal, por el contrario se puede decir que si se realiza de manera responsable y controlada, hace parte simplemente de las muchas y diversas maneras que el ser humano tiene para descubrir y encontrar su deseo sexual.
Cómo ya dijimos, en todas las filias se debe saber actuar, para evitar que se conviertan en un problema, como por ejemplo fetiches que terminan por controlar y definir la vida de la persona en su totalidad, o peor aún que puedan ocasionar problemas de diferente tipo, desde físicos, hasta psicólogicos, o incluso de carácter económico y social.
En el sadomasoquismo y la dominación se debe tener especial cuidado y atención, ya que es fácil pasar los límites, es una práctica erótica que debería ser practicada exclusivamente por personas con un profundo conocimiento de la sexualidad en general, y de su propia identidad sexual, personas con una profunda educación sexual que sepan lo que quieren y entienden la esencia de la práctica.
Desde luego lo anterior se refiere a una práctica fuerte e intensa, pero no siempre es así, también se puede practicar con cualquier pareja de manera muy leve, a manera de juego erotico, de hecho en cualquier sexshop o tienda sexual, es posible encontrar kits de juego para esta práctica, que incluye antifaz ropa de látex y un látigo de mentiras.
Así que no te asustes, jugar un poco con tu pareja en ese camino de descubrimiento de la sexualidad no significa que estés cayendo en algo que se puede convertir en una espiral de errores ni mucho menos, por el contrario esto es totalmente saludable y puede ayudar, como cualquier otro juego, a despertar la chispa de la pasión y a descubrir nuevas experiencias.
El origen del sadomasoquismo y la dominación
Todos hemos escuchado o leído en alguna ocasión, esa famosa frase que dice que en el sexo todo es válido mientras todas las partes involucradas sean conscientes y estén de acuerdo, y eso es cierto, aunque con un pequeño matiz como como dijimos antes, mientras no condicione ni perjudique el libre acontecer de la vida diaria, por lo demás cada quien es libre de disfrutar su sexualidad.
Para entender esta conducta debemos saber que se trata de una adaptación de dos condiciones psicológicas que se unieron para dar origen al término sadomasoquismo, y que ninguna de las dos tiene un carácter exclusivamente sexual, de hecho en casos extremos se pueden considerar enfermedades psiquiátricas y pueden ser extremadamente peligrosas.
Por un lado está el sadismo, término acuñado en alusión al famoso escritor marqués de sade quien en sus libros habló abiertamente del placer obtenido por causar dolor a otra persona o incluso verla sufrir, en muchas de sus novelas que fueron prohibidas, generalmente la mayoría de sus personajes no sobrevivían.
Por el otro, se encuentra el masoquismo, una condición en la cual ocurre lo contrario, la persona disfruta y quiere ser sometida humillada y maltratada, de esta condición se comenzó a hablar en la época de la esclavitud, cuando se observo que algunos esclavos llegaban a un punto en el que querían ser maltratados porque era la vida que conocían y para demostrar fidelidad a sus amos.
Es así como de la unión de estos dos términos, que repetimos, no tienen un carácter sexual necesariamente, se acuñó la palabra sadomasoquismo que si tiene un carácter meramente sexual, y su objetivo no es dañar ni ser dañado, por el contrario se busca un alto grado de placer por la emulación de estas actividades de autoridad absoluta por un lado y de sumisión total por el otro.
Como ves la sumisión o sadomasoquismo es un tema un poco más complejo de lo que pudieras pensar, porque puede tener tintes de carácter delicado si no se es plenamente consciente de lo que representa y de sus límites.
Pero no te alarmes, como dijimos antes, jugar un poco con tu pareja de manera normal sin ir a extremos, no significa que sea algo malo, de hecho es algo bastante normal para descubrir la sexualidad, pero es justo que seas consciente también que se puede llegar a una línea delgada entre el placer sexual genuino y algo que no va más allá, cuéntanos en los comentarios que opinas de ésta práctica.